en la que elegiremos el nuevo Parlamento Vasco.

viernes, 9 de mayo de 2008

¿Banca versus Empresas Libres?

Ayer, en las noticias de las 7 de la tarde por la radio, oí con cierta alarma, cómo una de las grandes empresas vizcaínas, con una importantísima cartera de pedidos, y con grandes raíces asentadas en la geografía de este país se rinde ante la incomprensible cerrazón de las entidades bancarias y de crédito que, por otra parte, tras cada balance bancario nos provocan la inconfesable envidia de ver como año tras años multiplican sus beneficios a expensas, entre otros motivos, de sus clientes.

Y, partiendo de la dudosa afirmación de que ganar dinero en época de crisis no tiene por qué ser necesariamente símbolo de insolidaridad humana, social, nacional, o como quiera simbolizarse, el hacerlo mientras paralelamente ahogas a empresas condenándoles a medidas extremas es algo que, en principio, suena como manifiestamente insolidario.

Y claro, que luego sean esas mismas entidades las que, de una u otra manera, como pulpo de número infinito de brazos atenazadores, maniaten e inmovilicen a empresarios, emprendedores y demás agentes imprescindibles en un país que lucha por su futuro, dejan un desagradable sabor de boca que no se cura con una simple campaña electoral o de imagen.