en la que elegiremos el nuevo Parlamento Vasco.

lunes, 19 de noviembre de 2012

Los cipayos de la "izquierda aberchale" en Sopelana y sus colecciones de siglas

Los chicos de la izquierda radical vasca si algo han aprendido en su largo viaje de reciclaje como conglomerado dirigido desde cúspide militar a partido político democrático homologable con el resto de los existentes en su entorno ha sido lo de manejar innumerables siglas con el fin de aparentar diversidad, abundancia y confluencia en sus bla bla blas, pero a pocos de fuera de su entorno han conseguido engañar.

En Sopelana, esta última semana, a cuenta de su maldita guerra de banderas, están concluyendo parte de su viaje y pasando de quemar contenedores porque otros ponían la rojigualda en las instituciones, aunque fuese por imperativo legal, a ponerla ellos, sí, han leído bien, ellos, en las instituciones que ahora gobiernan. 

Y estos días, decía, están volviendo a usar la maldita formula de la acumulación ficticia de siglas. Así, para firmar su panfleto crítico con lo que ellos han hecho, han utilizado todas las siglas de su historial, desde la primeriza HB, EH, ..., las de sus satélites mas o menos absorbidos mientras todavía sobrevivían difícilmente en la política vasca (EA y algunas de las "desuniones" de la izquierda unida histórica. Y tampoco han dudado en sumarse una sigla, Euskadiko Ezkerra, por el mero hecho de que uno de sus ex-miembros se haya sumado al nuevo conglomerado pseudo-revolucionario. 

De las demás no puedo decir nada porque ni me van ni me vienen, pero de esta última puedo certificar la falsedad de apoyo. Probablemente les dé igual quitarla, y creo que lo harían si se les recordase que no hacían otra cosa que llamarles cipayos, nombre que en esto de aplicar la política imperialista de Madrid, vía versión bandera en su propio pueblo se les podría aplicar ahora perfectamente a ellos. ¡Cosas veredes, amigo Sancho!