Una exposición singular. Dubuffet pretendía crear un arte tan libre de las preocupaciones intelectuales como el Art Brut, crea figuras elementales y pueriles y, a menudo crueles. Se inspiró en los dibujos de los niños, los criminales y dementes, en personajes bufos, morbosos, o seres infrahumanos, figuras deformes, absurdas y grotescas.
Paisajes, desnudos, esculturas, grabados e incluso una vela decorada siguiendo sus criterios cromáticos, la exposición refleja el genio de un artista que exploró caminos hasta entonces sin recorrer en el mundo del arte. |