En los colegios no hay que enseñar lo que quieran los padres.
En los colegios hay que educar en igualdad, tolerancia, respeto y convivencia.
De esta forma, el hijo de un fascista tendrá la oportunidad de no ser como su padre.
Y eso, solo una Escuela Pública puede garantizarlo.

domingo, 2 de febrero de 2025

Religiones, libertad de expresión, Código Penal,
creencias desmesuradas e imposiciones festivas.

 Sin tener que recurrir a otras cuestiones vitales en una democracia como la libertad de expresión, parecería lógico dar la bienvenida a la eliminación del delito contra los sentimientos religiosos recogido en el Código Penal.
Porque a lo intransferiblemente subjetivo de cualquier sentimiento se une que profesar una religión implica una experiencia íntima y una concepción particular de la realidad misma. Y eso es un elemento muy difícil de medir. Establecer si una expresión o un acto atentan contra esa combinación es algo de casi imposible discernimiento en numerosas ocasiones.

Los representantes de las principales confesiones religiosas presentes en España recordaron que la protección de la libertad religiosa es precisamente garantía de la plena libertad de expresión, y que algo que atenta contra ella son las bromas hirientes, los estereotipos o la ridiculización. A partir de la reforma, estas podrán practicarse "contra la religión" al amparo de la libertad de expresión.
elpais.com/el-peligro-de-la-barra-libre-contra-la-religion

Sería muy falso e injusto que la Iglesia Católica se rasgue las vestiduras por sentirse ofendida por las opiniones de personas que no compartimos su opinión.
Pero primero debería de reconocer que su organización ha contribuido a oprimir a la ciudadanía durante siglos obligándoles a creer lo que ellos les decían.
E incluso actualmente siguen obligándonos a que celebremos oficialmente esos días en los que ellos nos recuerdan que sus referentes fueron madres vírgenes, se elevaron a los cielos sin morir y cosas así.

Impedirnos sonreír ante ciertas afirmaciones suyas que nos obligan a vivir sí que no es democrático. El que viviesen sus creencias en su intimidad sin obligar a nadie a compartirlas, aunque sea de manera festiva, podría ser el comienzo de ese respeto democrático mutuo.