La corrida de ayer fue paralela a la metereología.
Triste y gris.
Los Miura defraudaron rotundamente.
La divisa primero, y los castigos de varas con puyazos excesivos
impidieron que posteriormente las faenas fuesen
minimamente plausibles.
En definitiva, siendo Bilbao, en teoría, una plaza "de primera",
ni toros, ni toreros estuvieron a la altura.
Cincuenta años de Feria no conocían,
hasta ahora, tan poca asistencia de público,
algo que, visto lo visto, parace bastante razonable.
impidieron que posteriormente las faenas fuesen
minimamente plausibles.
En definitiva, siendo Bilbao, en teoría, una plaza "de primera",
ni toros, ni toreros estuvieron a la altura.
Cincuenta años de Feria no conocían,
hasta ahora, tan poca asistencia de público,
algo que, visto lo visto, parace bastante razonable.