Hasta ahora, muchos lectores han renunciado a leer la obra cumbre de las letras españolas y una de las más importantes de la literatura mundial porque el texto, en el castellano que se hablaba hace 410 años, les resulta demasiado difícil.
En este libro, la obra de Cervantes se ha rejuvenecido y actualizado, poniéndose al alcance de muchos lectores a los que el esfuerzo de consultar las eruditas notas a pie de página o los vocabularios antiguos, disuadían de leer la novela de Cervantes de principio a fin. Así lo indica Vargas Llosa en el prólogo y no le falta razón.
La nueva edición no reproduce la obra original y añade notas a pie de página para aclarar los pasajes que pueden resultar más oscuros, ya sea por la distancia histórica y de costumbres, ya sea por una cuestión lingüística, sino que está adaptada al castellano actual. Y es de agradecer.
«Don Quijote de la Mancha» se estructura en dos partes y su originalidad estriba en que es la primera obra genuinamente desmitificadora de la tradición caballeresca y cortés por el tratamiento burlesco que le da, además de iniciar la novela moderna y la polifónica.
Andrés Trapiello (Manzaneda de Torío, León, 1953) es un experto cervantista, autor, entre otras, del ensayo «Las vidas de Miguel de Cervantes» (1993), es Premio Nadal y Premio Nacional de la Crítica.