Un ciudadano que en 2019 se "convirtió" al catolicismo, religión que terminó de
ayudarle a formar su modo de ver el mundo.
Una forma, en mi opinión, repugnante.
Oposición al aborto, es decir ni yo ni nadie, a no ser que tengan pasta y "lo hagan por lo privado", rechazo al cambio de sexo en menores y militancia profamilia han sido sus esloganes más habituales estos últimos años.
Y así, militando en "ni hacer ni dejar hacer, ni joder, ni dejar joder" avanza en su escalada al poder. La masacre de Gaza, y otros muchos escenarios bélicos mundiales, cuentan con su bendición. La expulsión en su país de ciudadanos sin papeles y un etc ... muy grande. Todo muy "católico".
Es, probablemente, el católico con un puesto más alto en el "poderío mundial", y el Vaticano rendido a sus pies, porque, si no te opones, confirmas tu sumisión o tu acuerdo a sus propuestas.
Es admirador de las políticas social patriotas del presidente de Hungría, Víctor Orban y de otros muchos fascistoides en el planeta. Y su Iglesia, calla y otorga. Quizás estos días estén demasiado ocupados en desfilar disfrazados pero tampoco creo que reaccionen tras la resurrección de su líder.
Y si su organización no le corrige y sí le bendice
que luego no nos vengan con hostias.
ayudarle a formar su modo de ver el mundo.
Una forma, en mi opinión, repugnante.
Oposición al aborto, es decir ni yo ni nadie, a no ser que tengan pasta y "lo hagan por lo privado", rechazo al cambio de sexo en menores y militancia profamilia han sido sus esloganes más habituales estos últimos años.
Y así, militando en "ni hacer ni dejar hacer, ni joder, ni dejar joder" avanza en su escalada al poder. La masacre de Gaza, y otros muchos escenarios bélicos mundiales, cuentan con su bendición. La expulsión en su país de ciudadanos sin papeles y un etc ... muy grande. Todo muy "católico".
Es, probablemente, el católico con un puesto más alto en el "poderío mundial", y el Vaticano rendido a sus pies, porque, si no te opones, confirmas tu sumisión o tu acuerdo a sus propuestas.
Es admirador de las políticas social patriotas del presidente de Hungría, Víctor Orban y de otros muchos fascistoides en el planeta. Y su Iglesia, calla y otorga. Quizás estos días estén demasiado ocupados en desfilar disfrazados pero tampoco creo que reaccionen tras la resurrección de su líder.
Y si su organización no le corrige y sí le bendice
que luego no nos vengan con hostias.