No deja de ser curioso que el origen de las protestas de un centenar de jóvenes de Gazte Koordinadora Sozialista (GKS) sea
Sozialista (GKS) sea la reivindicación de montar una txosna en el campus universitario durante las fiestas de La Blanca. Esta es una de las principales batallas que enfrentan al Movimiento Socialista (MS) con la izquierda abertzale tradicional.
Si nos quedamos en la idea de txosna, la batalla parece ridícula, pero si escarbas un poco en el tema, de la palabra txosna llegas a "suculenta cantidad de dinero" que no pasa por la hacienda foral y te permite unos ingresos oscuros que "ayudan" a mantener su "lucha ideológica". De ahí que, conocedores como pocos del "chollo económico" que supone una txosna, sus opositores procuren que no les den permiso e n los pueblos y barrios mara montarlas. Y por ello, el conflicto.
Una posible solución podría pasar por un control municipal del reparto de las mismas, de su ubicación y horarios, y un tratamiento, cuando menos similar, al de los hosteleros del municipio que pagan impuestos todo el año.