en la que elegiremos el nuevo Parlamento Vasco.

martes, 7 de agosto de 2012

27-Huida al norte

Cada día laborable
un capítulo (27/35)
El día treinta de Junio fue jueves. Lamikiz pagó la cantidad estipulada antes de entrar en el trabajo. Todavía no le había dicho a su amante que le estaban chantajeando. No quería decírselo. Lo que sí le había comentado era que tenían que andar con cuidado porque su mujer había empezado a sospechar algo. 


Lamikiz quería seguir encontrándose con su secretaria. No quería  renunciar a acostarse con esa joven fogosa de pechos hermosos y trasero formidable. Pero tampoco quería tener que pagar al chantajista todos los meses los dos mil euros que éste parecía haber estipulado. 


No quería permanecer sin hacer nada hasta que recibiera la próxima carta, con fotos nuevas o sin ellas. Era evidente que quien le pedía el dinero tenía muchas fotografías y había encontrado una mina que no quería abandonar. Conseguía un sueldo mensual a cambio de una amenaza escrita. Rentable.