Propone Vox que las embarazadas de Castilla y León puedan escuchar el latido de sus fetos, pedir ecografías 4D y atención psicológica por la Seguridad Social.
Si Vox consigue modificar el protocolo sanitario para que las embarazadas reciban atención psicosocial preferente y ecografías 4D, todas las embarazadas de Castilla y León deberían solicitarlo. Si luego no quieren abortar, les irá bien la terapia. Querer tener hijos en España es motivo suficiente para hacerse mirar.
En este marco socioeconómico, las que no llegan desquiciadas al embarazo sucumben después, justificando de sobra una partida especial de atención psicológica. Y, como Castilla y León es la única comunidad que se ha negado a que Justicia derive a las víctimas de violencia de género a los servicios sociales, es de justicia poética que sea la primera región en ofrecer acompañamiento psicológico a las embarazadas que lo soliciten. Además, quién no quiere ecografías 4D desde el primer trimestre de embarazo. Una clínica privada te cobra entre 150 y 200 euros, más de la mitad de lo que cuesta un aborto privado con anestesia local.