No dudo que se aprobó con la mejor voluntad.
Pero con la misma sinceridad hay que reconocer
que algo no se hizo bien
si en parte, de alguna forma,
ha permitido que sea interpretada de manera
que parezca que a los que están a favor de la ley
les haya salido el tiro por la culata.
Mientras Trump habla del éxito del plan de paz, los israelíes mantienen los dedos en los gatillos de armas que siguen apuntadas a la población civil de Gaza. (martin.gak)