Somos muchos los que veríamos con gran extrañeza la formación de una coalición, tal como la presentó ayer algún medio de comunicación. Yo creo que bastante unidos estamos ya, incluso demasiado diría yo, como para promover mas compromisos juntos a futuro. ¿O es que al final el referéndum, del que solo sabemos la fecha, va a ser más importante a la hora de las alianzas que los proyectos de incineradoras, conexiones ferroviarias, autovías de comunicación imprescindibles para el país, o campañas de desobediencia civil, todo ello puntos claves de EB-B o de EA y que, en mi opinión, son importantísimos puntos de desencuentro?.
Además, estar de acuerdo en Madrid en un tema no implica estar de acuerdo en los demás. Si hasta ahora hemos ido por separado, una de dos, o hemos sido especialmente gilipollas hasta ahora por no habernos dado cuenta antes de nuestra afinidad, o hay temas sociales, políticos, económicos, prioridades en infraestructuras, etc... que permiten pensar que hay un notable margen de diferencia que a la ciudadanía no se le puede quitar el derecho a elegir. Acudir en una única lista a Madrid y levantar la mano conjuntamente en una votación que se sabe perdida de antemano, y a continuación montar el numerito porque opinamos distinto en algo no menos importante para la ciudadanía, y solo hay que tirar de archivo para constatarlo, no nos dejaría bien en ningún caso.
Yo creo, sinceramente, que en el campo de la política se han hecho ya casi todo tipo de pruebas. Repetir los mismos pasos suele llevar al mismo sitio y, teniendo en cuenta que no está el horno para bollos, los experimentos con gaseosa.