Desde este blog, su autor quiere apostar también por el acuerdo y la superación de desencuentros que este año dos mil siete han "florecido" en mi entorno, en mas de una ocasión, de manera muchas veces innecesaria y claramente contraproducente.
Se me ha invitado a hacerlo públicamente y lo hago encantado. Pido disculpas, públicas también, a quienes se hayan podido sentir ofendidos o contrariados por alguna de mis actuaciones, reales o virtuales, y en mutua correspondencia, acompañados con la llegada de la Navidad y la entrada en un nuevo año, converger en una nueva fase, sin tensiones innecesarias ni debates superfluos.
Apuesto por los acuerdos y por remarcar más lo que nos une que lo que nos diferencie, por el innegable respeto a la discrepancia y a la libertad de expresión y todo ello, dentro de los margenes que, pública y voluntariamente, nos dotamos.
Y estoy de acuerdo con lo dicho por un alderdikide el viernes, en la antesala de la asamblea nacional. Es bueno que en los órganos directivos del partido estén representadas todas las diferentes opiniones del mismo. Desde los órganos más cercanos a las bases hasta las máximas instancias de la organización.
Y estoy de acuerdo con lo dicho por un alderdikide el viernes, en la antesala de la asamblea nacional. Es bueno que en los órganos directivos del partido estén representadas todas las diferentes opiniones del mismo. Desde los órganos más cercanos a las bases hasta las máximas instancias de la organización.