Desastre de convocatoria en la
"Euskal selekzioa"
(El nombre impuesto ya es ridículo de por sí)
(El nombre impuesto ya es ridículo de por sí)
Ni un tercio de entrada en San Mamés.
¿Frialdad. Tristeza. Olvido. Catástrofe?
No. La pachanga no da más de sí.
Sería interesante saber lo que ha costado
esta pantomima.