Un precioso espacio canario escasamente promocionado y/o cuidado
por la administración turística correspondiente.
Pese a lo que anuncian algunas webs, en mi opinión, sí merece la pena su visita.
Ningún cartel que lo indique, Cerca del lugar solo hay cabida para dos coches y dos motos.
Se encuentra en una subida y cuesta llegar al lugar.
Una ver allí es difícil saber qué camino coger si no tienes la suerte de encontrar
a alguien que venga de este hermoso paraje.
Recomiendo su visita. Si vais en moto mejor.
Buen calzado y equilibrio.
El lugar merece la pena.
Y a las autoridades turísticas canarias :
Ignorarlo no sirve para defenderlo. La gente irá sí o sí.
Por fa, cuidarlo, anunciarlo y protegerlo.
Es un hermoso tesoro.