1. Reivindicamos nuestro derecho a participar activamente en la planificación, elaboración y toma de decisiones en los distintos ámbitos. Para ello, las instituciones públicas deberán facilitarnos los medios necesarios.
2. Pedimos a representantes políticos, agentes sociales y administraciones públicas de Bizkaia, que se comprometan a desarrollar programas de envejecimiento activo y que incrementen los recursos humanos y materiales necesarios para garantizar unos cuidados dignos y de calidad: residencias, centros de día, servicios de apoyo a personas en situación de dependencia, así como a sus familias y personas cuidadoras. Queremos reivindicar también el derecho a seguir viviendo en la intimidad de nuestras casas, siendo atendidas por servicios públicos.
3. Las personas mayores hemos jugado un papel determinante en este país, y lo seguimos haciendo ayudando a nuestros hijos, hijas, nietos y nietas a seguir alcanzando nuevas cotas de bienestar y desarrollo humano y social. Denunciamos como falsa e interesada la imagen que transmiten de nosotros y nosotras algunos medios de comunicación y exigimos que muestren una imagen real de esta etapa de la vida.
4. Creemos imprescindible unas pensiones públicas dignas, para todas y todos, como recomienda la Carta Social Europea y una revalorización periódica de las mismas en función del IPC subyacente.. Hay que acabar definitivamente con la brecha de las pensiones, que discrimina de forma inadmisible a un gran número de mujeres.
5. Hacemos un llamamiento a todas las personas mayores para que se animen a participar en las asociaciones y en los distintos ámbitos de la vida social, y así hacer llegar a la administración y difundir nuestras propuestas y reivindicaciones.
Para terminar, trabajaremos para que lo que se recoge en este manifiesto no se limite a ser una declaración de intenciones, sino que sea un compromiso de cada día de todas nosotras y nosotros.