Ya en junio, millones de estadounidenses comunes y corrientes,
de todos los ámbitos, salieron pacíficamente a las calles
y declararon al unísono:
¡No a los reyes!
de todos los ámbitos, salieron pacíficamente a las calles
y declararon al unísono:
El mundo vio el poder del pueblo,
y el intento de coronación del presidente Trump
se derrumbó ante la fuerza de un movimiento
que se alzó contra sus abusos de poder.
Ahora, redobla sus esfuerzos:
envía agentes militarizados a nuestras comunidades,
silencia a los votantes y otorga beneficios
a multimillonarios mientras las familias pasan apuros.
Esto no es solo política.
Es democracia contra dictadura.
Y juntos, elegimos la democracia.