Huele a cena de despedida, y tanto amigos como enemigos del que huele a historia pasada no quieren perderse el momento. Unos acuden con nostalgia y otros con vocación forense. Y aunque mientras existió, muchos dijeron que al funeral solo acudiría el perro, el morbo por verlo de cerca ha hecho reconsiderar a más de uno, haciendo que al final falten sillas y el tanatorio se haya quedado pequeño.
Y eso de que "todos los protagonistas del final tienen que tener la sensación de que han ganado" es una de las mayores idioteces que he podido escuchar estos últimos días. Gana la democracia y pierden los violentos. Y si en el camino, algunos se cambian de bando, bienvenidos, pero seguimos ganando los demócratas, que parece que cada vez somos más, y siguen perdiendo los violentos, que también parece que cada vez son menos.
Yo estoy de acuerdo en acudir a la cita y, personalmente, me congratulo de que EAJ-PNV y PSE-EE acudan a la misma. Solo les pido una cosa. Que mantengan en todo momento sus principios y convicciones, esas que nos han estado contando estas últimas décadas, y que no se dejen enredar en "llamadas de sirenas". ETA no puede dar marcha atrás, declarará el cese definitivo y unilateral de sus estropicios y asesinatos, y la izquierda abertzale solo puede abrazar el estado de derecho y la democracia que los demás intentamos desarrollar desde hace 30 años, imperfecta sin duda, pero único camino para avanzar en cualquiera de las direcciones que la mayoría de la ciudadanía proponga.
Aquí no va a haber milagros, ni se va a mover ninguna pieza sin que ETA previamente cierre la persiana. Algunos hablarán de resultados milagrosos del encuentro de hoy, de acuerdos largamente esperados y de concesiones del estado de derecho. Que hablen lo que quieran, que se saquen todas las fotos que quieran, si les sirve para relajar y hacer avanzar a su gente al terreno de la democracia, genial. Pero sin más. Si quieren creer que una reunión como la de hoy va a servir para algo más que para darle a ETA una excusa para su ante-último comunicado, ellos mismos. Que piensen lo que quieran. Así que, bienvenida "Conferencia de Fierabrás". Que por nosotros no quede. Démosle otra oportunidad a la paz.
Yo estoy de acuerdo en acudir a la cita y, personalmente, me congratulo de que EAJ-PNV y PSE-EE acudan a la misma. Solo les pido una cosa. Que mantengan en todo momento sus principios y convicciones, esas que nos han estado contando estas últimas décadas, y que no se dejen enredar en "llamadas de sirenas". ETA no puede dar marcha atrás, declarará el cese definitivo y unilateral de sus estropicios y asesinatos, y la izquierda abertzale solo puede abrazar el estado de derecho y la democracia que los demás intentamos desarrollar desde hace 30 años, imperfecta sin duda, pero único camino para avanzar en cualquiera de las direcciones que la mayoría de la ciudadanía proponga.
Aquí no va a haber milagros, ni se va a mover ninguna pieza sin que ETA previamente cierre la persiana. Algunos hablarán de resultados milagrosos del encuentro de hoy, de acuerdos largamente esperados y de concesiones del estado de derecho. Que hablen lo que quieran, que se saquen todas las fotos que quieran, si les sirve para relajar y hacer avanzar a su gente al terreno de la democracia, genial. Pero sin más. Si quieren creer que una reunión como la de hoy va a servir para algo más que para darle a ETA una excusa para su ante-último comunicado, ellos mismos. Que piensen lo que quieran. Así que, bienvenida "Conferencia de Fierabrás". Que por nosotros no quede. Démosle otra oportunidad a la paz.
