Tras más de una década esperando a que la Justicia dictamine, ésta nos ha informado sobre la falta de culpables en el tema del Prestige.
No voy a entrar en el tema. Sinceramente, hacerlo requiere tener muchos más datos de los que tengo. Pero lo que sí que me parece evidente es que cualquier decisión que se tome ante un acontecimiento como este, por mucho que la instrucción requiera de tiempo, es absolutamente injusto.
Cualquier decisión de la Justicia, aplazada en el tiempo, once años en este caso, convierte a ésta en Injusticia. Sin más. ¡Ojala, nunca más!