Es lamentable que una pelea ridícula como ésta dure tantos años y los partidos sean incapaces de canalizarla como se ha hecho con otros múltiples actos que se han actualizado a una realidad donde la igualdad de derechos sea el origen de cualquier actividad.
Mientras Trump habla del éxito del plan de paz, los israelíes mantienen los dedos en los gatillos de armas que siguen apuntadas a la población civil de Gaza. (martin.gak)