Hermosa mañana la de ayer para disfrutar y presenciar en la misma playa la ya tradicional carrera hípica. Una buena alternativa para usar nuestros arenales además de para pasear al perro o jugar al balón.
Lamentablemente, también hemos podido ver la gran chorretada de cemento vertida por algún descuidado de las obras que están a punto de terminarse y que no ha tenido la menor intención de disimularlo. Realmente, ¿piensan dejarlo así hasta que la arena lo cubra?