Muchas veces he comentado la tristeza que me produce, entre otras sensaciones, el comprobar una y otra vez que, gracias a la LTH, a la mentalidad de muchos de mis conciudadanos, y a las ganas de algunos de seguir estirando de la teta de la administración hasta que se rompa, seguimos duplicando servicios y, lo que es peor, multiplicando el coste para conseguir lo mismo a costa de la duplicidad de gastos que, en aras de derechos históricos mal entendidos y peor aplicados, seguimos sufriendo.
Fueron varias las veces que acudí a FITUR en la década anterior y comprobé, y así lo denuncié en este blog, que si cada administración que tiene capacidad de gestionar un área dentro de sus competencias, actúa a su bola, intentando preferentemente desmarcarse del vecino, para marcar distancia, procurando demostrar que eres mejor, mal vamos. Y así, por ejemplo, municipios como Barakaldo o Santurtzi muchas veces han acudido a la cita turística más importante del Estado con sus propios stands, desmarcándose de los que organizaba y coordinaba el Gobierno Vasco. Derroche y despilfarro innecesario.
Ahora, este año, son Bilbao y Bizkaia los que se desmarcan en Madrid del resto de Euskadi. Dirán, aparentemente indignados, que no tiene nada que ver con la política, y habrá que decirles que les creemos.¡Ja!.