El PP ha convertido el asunto Rivera en un fracaso propio cuando realmente es un éxito para el País

viernes, 23 de marzo de 2012

Melchor Gil y el PSE-EE


Me asombra cómo ésta abordando la dirección del PSE el caso de su vicesecretario general de Bizkaia, Melchor Gil, tratando de difuminar la gravedad de las irregularidades fiscales, al pretender focalizar toda su preocupación y atención en la filtración del expediente fiscal. 

El asombro se torna en preocupación al ver que la dirección socialista no se plantea destituir de su cargo en el partido hasta que no se le declare como imputado en el procedimiento penal que pudiera abrirse. El asombro y la preocupación social se han agravado al oír las declaraciones del lehendakari, calificando de “errores en la declaración”, al no haber incluido en sus declaraciones fiscales las importantes sumas que tras la inspección reconoció, regularizando su situación mediante el pago de la deuda y la correspondiente multa. 

Si los dirigentes socialistas realmente creen que tras la filtración se esconde una operación del PNV para desacreditar al lehendakari y neutralizar al PSE cara a las próximas elecciones autonómicas, está claro que la estrategia que han elegido para la mejor protección de Patxi López resulta nefasta desde todos los puntos de vista; sea éste político, judicial o social. Quede claro mi absoluto rechazo de las filtraciones de los expedientes fiscales, de Melchor Gil y de cualquier otro ciudadano, con cargo político o sin él. Pero una estrategia ofensiva, de respuesta a la supuesta maquinación que se le atribuye a la Diputación de Bizkaia, requería como condición primera e indispensable la adopción de medidas en el seno del partido, particularmente el cese como vicesecretario general de Bizkaia, en razón a sus ‘olvidos’ en las declaraciones de renta, que lisa y llanamente forman parte del capítulo conocido como ‘fraude fiscal’.
Xabier Gurrutxaga en Vocento