Dicen que cuando le señalan con el dedo al bosque el tonto se queda mirando al dedo.
Y parece que cuando a una organización le señalan como refugio de pederastas con hostias formando la palabra maldita que recoge la acusación a innumerables sacerdotes católicos, algunos se ponen a rezar el rosario acusando de profanación contra sus sentimientos religiosos sin decir una palabra contra los actos por los que han sido condenados numerosos colegas en la fe.
Rezo del Rosario en el interior de la sala de exposiciones (DN.es) |