En la fachada de la iglesia se pueden ver hasta tres vírgenes de diferentes
nombres, todas ellas, según la institución, muy arraigadars en la localidad.
La del Rosario, la de los Dolores y la del Carmen. Esas por lo menos.
Con tanta virgen no me extraña que el Papa emérito
siga obligando a sus sacerdotes (todos varones) a mantener el celibato.