La formación jeltzale considera que la sociedad y los colectivos a los que decían defender han dado la espalda a los convocantes, de manera especial a ELA y LAB, cuya clase dirigente debe someterse a un profundo y sincero ejercicio de autocrítica Un fracaso absoluto.
El seguimiento voluntario de la protesta ha sido muy limitado tanto en el sector público como en el privado, y una inmensa mayoría de la ciudadanía vasca ha decidido acudir a su puesto de trabajo pese a que las citadas organizaciones sindicales habían volcado todos sus esfuerzos (piquetes, barricadas, etc ...) y han recurrido hoy a todo tipo de estrategias para “paralizar el país”, tal era su objetivo declarado.
Un objetivo que los convocantes no han alcanzado ni remotamente ya que la misma sociedad y los mismos colectivos a los que decían defender les han dado hoy claramente la espalda.
Excepto este párrafo, los tres anteriores proceden de fuentes jeltzales. El problema, al menos en Sopela, es que los mismos peneuvistas cierran su batzoki un día como hoy "para no echar más leña al fuego", "por la paz un ave maria" y excusitas parecidas.
Si los tres párrafos iniciales fuesen sinceros, hoy, por "narices", por "cojones" o "por "Sabino" hubiesen tenido abierta la sede, pero ...