El PP ha convertido el asunto Rivera en un fracaso propio cuando realmente es un éxito para el País

lunes, 20 de agosto de 2007

Esta semanita de vacaciones se la voy a dedicar a Aznar

“Mírenme a los ojos. Les estoy diciendo la verdad”, clamaba cínicamente Aznar, cuando lo entrevistaron sus comparsas de algunas televisiones, como Ernesto Sáenz de Buruaga o Alfredo Urdaci.

Nos mintieron vilmente para justificar lo injustificable. Ni Sadam Husein –que era ciertamente un dictador- disponía de armas de destrucción masiva, capaces de poco menos que de hacer saltar el mundo por los aires en pocos minutos, ni era amigo de Ben Laden, ni el epicentro del terrorismo de raíz islamista estaba radicado en Irak.

Aquello fue una canallada sin atenuante alguno, perpetrada por el actual Emperador de Occidente, George W. Bush, con la valiosa colaboración de Tony Blair y de José María Aznar, entre otros corifeos execrables. Aquello fue una guerra innecesaria, ilegal e inmoral. Así lo cuenta elplural.com y así fue ciertamente.

Y como esta semanita de fiestas y vacaciones no me quiero comer el tarro, se la voy a dedicar al Sr. Aznar, a recordar sus andanzas, sus hechos y sus frases. No se trata de joderle a nadie los días de estío sino de recordar, de una manera más o menos jocosa, cómo es y cómo piensa la derecha oficial del Estado, para que luego, a la hora de plantearnos ponencias y alianzas, actuemos en consecuencia.