Primero, sobre los secuestradores: algunos los consideran una especie de patrullas costeras que defienden sus aguas de los depredadores extranjeros. ¿Lo son?, ¿o son más bien mafias, conectadas con señores de la guerra o traficantes con base en grandes capitales europeas o asiáticas, que explotan un suculento negocio?
Segundo: ¿pueden nuestros barcos olvidar esas aguas y buscar otros caladeros?. No es nada sencillo: el Índico abastece el 40% de la industria transformadora europea. En otros caladeros escasean las licencias y no se puede abandonar así como así a los socios de Europa, Seychelles, Madagascar o Isla Mauricio.
Tercero: ¿cómo proteger a nuestros barcos?. Llevar militares a bordo de buques particulares puede convertir un incidente en un conflicto internacional. Lo que se ha decidido, vigilantes privados con preparación militar, suena a provisional. ¿Que situación legal se daría si se producen tiroteos y hay muertos?. La idea que España ha propuesto a la Unión Europea tiene mejor aspecto político y jurídico, pero no sabemos si sería muy funcional: adiestrar a somalíes para que ellos vigilen sus propias costas. Pero, ¿lucharían contra otros somalíes o se sumarían al negocio de la piratería?.
Cuarto: si se repitiera otro caso similar, ¿detenemos a los secuestradores o hacemos como que no les hemos visto?Los ciudadanos creemos haber aprendido que es mejor llevarlos a Kenia, pero ignoramos a qué conclusión han llegado el Gobierno o la Audiencia Nacional. Por cierto, el Gobierno ha sabido resolver bien, pero reaccionó con mucha lentitud y ha cometido fallos muy serios en la atención a las familias.
¿Y la justicia?. La nota del presidente de la Audiencia Nacional, sacudiéndose la responsabilidad de haber traído a los secuestradores a España fue penosa. Mas aún que el sainete de la minoría de edad del pirata. Parece mentira que en momentos tan delicados, nuestras instituciones manejen tan mal sus gestos públicos.
Quinto: tema de fondo… ¿pagar el rescate es claudicar?. Con treinta y seis vidas en juego, ¿hubiera decidido alguien algo distinto?. Por cierto, el rescate no lo ha pagado el Gobierno.
Hasta aquí el comentario de Gabilondo en su blog de noticias. Y a partir de aquí una posible propuesta que Luis Solana ha sacada a debate :
Los europeos y los americanos hicieron una guerra para que la ex-Yugoslavia dejase de ser un disparate de muertes. ¿Y qué hicieron? aceptar tantos Estados como problemas. Tenemos que pensar que igual el modelo “Balcanes” hay que aplicarlo en otros conflictos internacionales. Somalia no existe y se considera un Estado fallido ¿por qué es un estado fallido? porque no se acepta que son varios Estados coherentes. Purlandia, Somalilandia, Somalia o lo que sea, sí pueden ser territorios organizados y con los que se puede negociar. Pero si se pretende que un No-Estado sea interlocutor, sólo cabe la ocupación militar.
Señores políticos, señores diplomáticos, señores militares: ¿hay que luchar y morir por unos Estados que no quieren serlo? ¿por qué no se acepta el modelo de los Balcanes para evitar lo que sufrimos en Irak, en Afganistán y en Somalia?.