A unas horas de la firma hoy del pacto alcanzado con el PSE sobre materia fiscal, el PNV dedicó ayer sus esfuerzos a convencer a sus seguidores de las bondades de un acuerdo que «favorecerá la reactivación económica y el empleo», según destacó Itxaso Atutxa en un acto celebrado en el batzoki de la localidad vizcaína de Basauri. La presidenta del Bizkai buru batzar fue la comisionada para pedir a la militancia que «mime» y «haga un sitio en su corazón» a la entente alcanzada con los socialistas tras casi cuatro años de desencuentros constantes cuando Patxi López ocupaba el despacho de Ajuria Enea donde ahora se sienta Íñigo Urkullu. (elcorreo.com)
Si no fuese por la seriedad del tema, a los que llevamos años defendiéndolo, e incluso hemos sido bilipendiados por decirlo cuando, según ellos, no correspondía, nos dan ganas de emocionarnos. Los mismos que meses antes se han desgallitado intentando marcar las diferencias e impidiendo que fuese posible un acuerdo con los socialistas, una vez que pisan moqueta en Vitoria, reconocen la conveniencia de llegar a acuerdos de país con aquellos que hasta entonces eran casi enemigos e infiltrados en el gobierno vasco.
La razón se ha impuesto. El reconocimiento de la Euskadi plural por fin parece que sale adelante.
Oyendo estas cosas dan ganas de solicitar que aquellos políticos que en un espacio corto de tiempo sean capaces de defender posturas tan diferentes fuesen automáticamente descalificados como pastores de rebaño, como líderes políticos serios que demuestran ser capaces de defender el blanco o el negro en función de sus propios intereses.
Si no fuese por la seriedad del tema, a los que llevamos años defendiéndolo, e incluso hemos sido bilipendiados por decirlo cuando, según ellos, no correspondía, nos dan ganas de emocionarnos. Los mismos que meses antes se han desgallitado intentando marcar las diferencias e impidiendo que fuese posible un acuerdo con los socialistas, una vez que pisan moqueta en Vitoria, reconocen la conveniencia de llegar a acuerdos de país con aquellos que hasta entonces eran casi enemigos e infiltrados en el gobierno vasco.
La razón se ha impuesto. El reconocimiento de la Euskadi plural por fin parece que sale adelante.
Oyendo estas cosas dan ganas de solicitar que aquellos políticos que en un espacio corto de tiempo sean capaces de defender posturas tan diferentes fuesen automáticamente descalificados como pastores de rebaño, como líderes políticos serios que demuestran ser capaces de defender el blanco o el negro en función de sus propios intereses.
