¿Fue un problema de agenda? Es decir, ¿No podía compaginar la visita al enfermo con la presencia en el acto florido? Toda una mañana, con aviones y coches a su servicio, y ... ¿no puede estar en Barcelona y en Bilbao a la vez?
Algo huele mal en una ausencia tan clara y evidente.
Ciertamente, si tuvo que optar, eligió la salida mas sencilla. Más cómoda. Visita a Palacio clínico, sonrisa a la prensa, tranquiliza al populacho con las noticias de salud del Borbón y sale en la tele con su cara aparentemente siempre optimista.
¿Prefirió eso a estar con los "suyos"?. ¡Pedazo detalle feo feo feo!