“La vida es como una carrera, la recompensa no está en la meta, sino en cada uno de los metros del camino”.

jueves, 28 de mayo de 2015

Rajoy, si eres candidato será a sepulturero.

Lo del PP es clavadito a la película sobre la caída de la cúpula del nazismo, El hundimiento. Se hunde Génova como una Torre Gemela, con gente saltando por las ventanas, histerismo, tirones de pelo, aspavientos y mucha polvareda. Para haber ganado las elecciones, hay que ver que mal lo llevan. Cualquiera diría que han perdido. Lo que están perdiendo son las formas y el orden y cuando la derecha pierde las formas y el orden, que es todo lo que tienen, están perdidos.

Las gaviotas abandonan el nido y para lo que les queda en el convento se cagan dentro. Lloran ahora lo que no supieron defender como barones. No se han atrevido a largar hasta que han dicho que se largan. Ha empezado “el vuelo de los faisanes dorados” como llamó el historiador Antony Beevor a la espantada de algunos líderes del nazismo cuando vieron que aquello se iba al garete y Hitler seguía en sus trece convencido de poder ganar la guerra que es como está Rajoy. Génova se desintegra bajo las bombas y el presidente dice que “está lloviendo un poco”. Le ha dicho Herrera que no sea ciego, que se mire en el espejo y se pregunte si debe ser candidato. Pero Rajoy no se ve porque es un vampiro que después de chuparle la sangre al país, se la chupa a su partido. Mariano, o no llegas o no pasas del verano. Si eres candidato será a sepulturero.