La Unión Europea debería quitarle al Gobierno y a la televisión israelíes la posibilidad de usar a sus cantantes
para blanquear su imagen y proyectar al mundo un país moderno, inclusivo, tolerante y progresista.

jueves, 3 de noviembre de 2016

El martes próximo no solo los norteamericanos se juegan su futuro.


En unos 80 días, 
alguien está tomando el juramento del cargo 
y asumirá el rol de comandante en jefe y presidente
del país más poderoso del planeta 
y bajo cuya órbita gravitamos en esta parte de Europa. 

¡Por fa!
Asegúrémonos de que no sea el candidato republicano.