A Xabier Gurrutxaga, en su artículo en el periódico EL CORREO de hoy, le ha llamado la atención, por su sentido común y su realismo político, las manifestaciones de Iñaki Galdos, candidato de EA a diputado general de Gipuzkoa, cuado reflexiona sobre la pérdida de posiciones del nacionalismo institucional representado por el binomio PNV-EA, pero sobre todo se alegra que haya puesto encima de la mesa un problema estratégico de gran calado, cual es el de la política de alianzas, a fijar teniendo en cuenta los objetivos que se pretenden en Euskadi y en Navarra. Dice Galdos, con razón, que ‘El eje central- refiriéndose al tripartito más Aralar- es insuficiente y, si tenemos en cuenta la correlación de fuerzas en el País Vasco y Navarra, difícilmente podremos avanzar en un proceso de normalización y gobernabilidad si no es con el PSE’. Puro sentido común, y si no que les pregunten a los respectivos homónimos de esas formaciones del eje central en Navarra, qué es lo que se debería hacer en la comunidad autónoma para ayudar a lo que ellos pretenden en la comunidad foral. Coherencia y sentido común.