Las izquierdas no socialdemócratas europeas
no pueden aplicar en 2025 a la actual situación geopolítica mundial
un discurso antimilitarista en los mismos términos que hace cuatro décadas.
El rechazo a la OTAN no tiene hoy el mismo significado que en 1986

viernes, 15 de junio de 2007

Hoy más que nunca me reafirmo en mi condicción de miembro de Amnistia Internacional

El cardenal y presidente del Pontificio Consejo para la Justicia y la Paz del Vaticano, Renato Martino, ha asegurado que tanto los fieles como las organizaciones católicas "deberían retirar su apoyo" a Amnistía Internacional (AI) debido a su recientemente aprobada política a favor del aborto en determinados casos.

Hasta hace poco, AI se declaraba oficialmente neutral en materia de aborto, pero el pasado mes de abril decidió empezar a apoyar el aborto en caso de que la mujer sea víctima de una violación o su vida o salud esté en peligro si sigue adelante con el embarazo.

La Iglesia Católica abunda en su despiste cuando actua de esta manera. Cada vez sus declaraciones tienen menos eco y la población las enmarca en la colección de despropósitos propios de una organización que ha encajado malamente los avances sociales de los últimos siglos.