La familia del dictador quiere casar a Leticia Giménez-Arnau en el Pazo de Meirás. Hoy mismo, y en el mismo lugar, la Comisión por la Recuperación de la Memoria Histórica realizará “una segunda boda” para reclamar la devolución de esa propiedad al patrimonio público.
Mas de treinta años después de muerto el enano cabrón, sus herederos siguen gozando de prebendas y de favores robados al pueblo por la cara, como el pazo motivo del post.
Lástima que una administración democrática sea tan lenta para quitarles lo que no les corresponde y devolvérselo al pueblo y a la propiedad pública del lugar.