Leí la semana pasada que a partir del próximo 1 de Enero se podrán utilizar las lenguas cooficiales en el Senado. No es que me parezca ni bien ni mal sino todo lo contrario. Creo que es simplemente un gesto de reconocimiento, lo cual siempre es positivo, y como tal simplemente habrá que tomarlo.
Lo que sí me resulta un tanto inconsecuente es que votantes que han defendido por activa y por pasiva este tipo de "detalles" en la capital del reino, luego voten como representantes a personas que por la boca "pequeña" dicen defender lo mismo pero por la de "verdad" son incapaces de manifestarse en las dos lenguas oficiales de su comunidad. Curioso por ambas partes. ¿no?