La Unión Europea debería quitarle al Gobierno y a la televisión israelíes la posibilidad de usar a sus cantantes
para blanquear su imagen y proyectar al mundo un país moderno, inclusivo, tolerante y progresista.

sábado, 29 de agosto de 2020

Gigantes y cabezudos ... de la derecha extrema.

Si el rubio presidente americano es reconocido como demócrata,
los que le aplauden hasta con las orejas se supone que también lo son.
¿No?
A no ser que si le damos la vuelta a la idea, nos demos cuenta que
si los que aplauden no son demócratas 
ni ganas que tienen de serlo ni parecerlo,
el aplaudido deje mucho que desear en esa faceta.

¿A cuántos votantes 
se la soplará la democracia y la convivencia internacional
y votarán a este esperpento?