Lo del Athletic está siendo muy grave. Hay quien dice que necesitan un importante tratamiento de choque que reanimen a esas almas en pena que deambulan por el campo con demasiada inseguridad, avanzan casi de espaldas centrando hacia atrás, con ceses imprecisos y manteniendo a la peña en un estado de pesimismo que yo no había conocido en las últimas décadas.
Pero es que el problema no termina con la temporada. Podemos salvarnos por la simple razón de que este año haya tres equipos peores que nosotros. Puede ser. Así fue el año pasado y puede repetirse este. Pero, si mantenemos a las mismas personas, las mismas lineas generales y los mismos principios actuales esta situación tiende a repetirse año tras año, y como lo que no mejora, empeora, y como la suerte no siempre acompañará, el estado de animo que muchos manifestamos de responsable y profunda preocupación está más que justificada.
No se si un jugador como Bart (un joven made out of euskadi) ayudaría a salir del bache, probablemente haría falta más de uno, porque yo no descartaría a nadie ni me autolimitaría en ningún aspecto a la hora de plantearme las posibles y mejores soluciones para mi equipo, y hacer lo contrario, al día de hoy, queriendo estar donde estamos, comienza a ser un nuevo modelo de autosuicidio colectivo.
A pesar de todo, ¡aupa athletic!