Por un lado, parece ser que Joseba Egibar, presidente del PNV de Guipúzcoa, mantiene la intención de someter a la consideración del nuevo EBB, que saldrá elegido el próximo 15 de diciembre, su propuesta de coalición nacionalista, Euskal Herria Bai, que integrarían en principio PNV, EA, EB y Aralar, para concurrir a las elecciones de marzo. Parece ser que algunos de los líderes de los otros partidos pueden estar interesados en la idea.
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Y esta última postura, marca distancias con los planteamientos realizados por varios dirigentes de EA, entre ellos su actual presidenta Begoña Errazti, en los que apelan a la desobediencia institucional y la rebeldía cívica para superar la negativa del Gobierno español a un acuerdo sobre la hoja de ruta trazada por el lehendakari y su gobierno tripartito.
Si algo bueno tiene la gran proliferación de partidos es que de esta manera, sin coaliciones previas innecesarias, las opciones de cada uno quedan claras y diáfanas al elector, o al menos así debería de ser.
Además, como bien se ha dicho este fin de semana, lo importante no es que haya mas número de partidos defendiendo una cosa u otra, desconfiemos de fórmulas que, bajo la apariencia de sumar mas votos, solo sirven para que nuestro proyecto se difumine, y procuremos que la mayoría ciudadana que se forme en Euskadi a partir del 2008, tras las próximas elecciones, sea solida, centrada y cualificada , sin dejar opción a dudas.
Actualizado a las 10:00
Hoy mismo, Unai Ziarreta, de EA, ha vuelto a lanzar el llamamiento al frentismo, un canto de sirena con apariencia de unidad que no es mas que "pan para hoy y hambre para mañana". Sinceramente, insisto, eso no es la solución. Dejemos claras las opciones de cada partido de cara al electorado, para que este pueda elegir libre y claramente. El PNV, en mi opinión, participando en Frentes con pequeños partidos, no ayudaría mas que a la sobrevivencia de los mismos sin clarificar el panorama político vasco, y eso, no creo que sea bueno.