La denominación de por sí, ya comienza mezclando churras con merinas. Somos un Estado Laíco ¿no?. Pues ya va siendo hora de separar las armas y las hostias.
Por un lado, si hablamos de armas, el origen de la fiesta proviene de la "reconquista" de Menorca a los ingleses con ayuda francesa. Y de aquellas celebraciones a las ceremonias castrenses actuales.
En otro lado, las hostias, en este caso "dialécticas", que reparte el señor Rouco acompañado de sus más fieles seguidores. Hablando, como siempre, de lo que más "sabe", como por ejemplo, "vivir en familia". El humor de Fontdevila en Público lo refleja muy bien: