¿Y si Rajoy prefiere que intervengan España?

Texto e imagen recogidas
del blog de luissolana.com

Muchos españoles se han quedado atónitos ante la reacción de los mercados tras la publicación (¡por fin!) de los Presupuestos Generales del estado para el año 2012. ¿Pero, no se nos pedía austeridad? ¿Pero, no ha decidido el Gobierno anunciar unas cifras durísimas en todos los ministerios? ¿Por qué generan desconfianza estos recortes tan importantes? Y lo que es peor: el Ministro de Economía empieza a ponerse públicamente nervioso ¿Cómo se puede anunciar como respuesta a la censura de los mercados que el castigo no es a España sino que es a Europa? No señor de Guindos, no nos quiera confundir: cuéntenos a qué precio obtiene préstamos Alemania y a qué precio los consigue España ¿Es Alemania Europa o no lo es? No ponerse nervioso y menos intentar juegos de palabras para confundir a los ciudadanos españoles; serenidad señor de Guindos: el problema de lo que le pasa a España lo tenemos los españoles, nadie más.

Una idea a no olvidar: los españoles debemos todo lo que produce toda España durante un año.

Otra idea fundamental: la confianza hacia quien debe dinero mejora si el deudor recorta gastos, no si recorta inversiones.

Miremos -una vez más- a una familia que le ha pillado su banco con deudas que no puede pagar. Esa familia puede anunciar al banco que no piensa arreglar la cocina (como tenía planeado) o que lo de cambiar las tapicerías nada de nada. Y el banco le pondrá muy mala cara. Como nos ha pasado con los Presupuestos de Mariano Rajoy a España. Los acreedores quieren que España reduzca gastos hasta niveles que permitan atender los préstamos, no solamente que reduzca las inversiones. El gasto es recurrente, la inversión es puntual. Más correcto (como en el ejemplo de la familia) es que además de reducir gastos venda parte del mobiliario doméstico, pero basar la credibilidad económica sólo en la bajada de la inversión es un error de primer curso.

Soy de los que creen que los Ministros de Guindos y Montoro tontos no son. Calculo que han leído más libros de economía que yo y que han viajado por lo menos como yo. ¿Por qué se sorprenden de que los mercados no aplaudan unas medidas equivocadas a medias? Pues porque saben que lo que Europa pide al Gobierno es que reduzca el gasto corriente, es decir que adelgace el Estado.

¿Qué Gobierno acepta rebajar el peso del Estado en la España endeudada? Hasta ahora ninguno.

Y tengo un temor: que Rajoy prefiera que esa reforma nos la hagan a la fuerza que hacerla él.  Vamos, que Rajoy prefiera que nos intervenga Europa a hacer las reformas él.

Soy seguramente muy mal pensado, pero empiezo a sospechar que el PP de Mariano Rajoy ha calculado que tiene menor desgaste político para el PP una intervención exterior que una acción del Gobierno de España.

Mientras no veamos al Gobierno afrontando la reducción real del gasto los mercados no se van a fiar.

Y espero que sea un mal sueño mi sospecha de la opción política de Rajoy para nuestro país: la intervención internacional.