El PP ha convertido el asunto Rivera en un fracaso propio cuando realmente es un éxito para el País

domingo, 20 de diciembre de 2015

Por primera vez vez en la historia democrática de este país nos vamos a la cama sin saber quién ocupará la Presidencia

Y como las fuerzas democráticas contrarias a que siga Rajoy en La Moncloa no sean capaces de consensuar o acordar unos puntos mínimos de gobierno y de consenso, una segundas elecciones a corto plazo acabarían con todos los sueños de cambio.

Las fuerzas nacionalistas vascas pueden jugar un papel fundamental en este balance de escaños entre fuerzas conservadoras y fuerzas de progreso. Y en estos momentos es cuando hay que mojarse.

No soy optimista, pero mantengo cierta esperanzas.