La Unión Europea debería quitarle al Gobierno y a la televisión israelíes la posibilidad de usar a sus cantantes
para blanquear su imagen y proyectar al mundo un país moderno, inclusivo, tolerante y progresista.

miércoles, 9 de septiembre de 2009

Princesa sí, docente no.

Según esta página está mejor visto ser princesa en España que docente en cualquier otro lugar del planeta. La organización recomienda que "sus" colegios no contraten docentes homosexuales ni divorciados y vueltos a casar, según publica este jueves el semanario Búsqueda.

¡Menos mal que ni a la princesa española le dió por ser docente en sus instituciones, ni las organizaciones laícas, como RTVE, siguen criterios tan retrogrados e injustos, porque desde el paro al que hubiese sido enviada por los que después la casaron, hubiera tenido más complicado ser lo que ahora pretende ser!