Según esta página está mejor visto ser princesa en España que docente en cualquier otro lugar del planeta. La organización recomienda que "sus" colegios no contraten docentes homosexuales ni divorciados y vueltos a casar, según publica este jueves el semanario Búsqueda.
¡Menos mal que ni a la princesa española le dió por ser docente en sus instituciones, ni las organizaciones laícas, como RTVE, siguen criterios tan retrogrados e injustos, porque desde el paro al que hubiese sido enviada por los que después la casaron, hubiera tenido más complicado ser lo que ahora pretende ser!