El PP ha convertido el asunto Rivera en un fracaso propio cuando realmente es un éxito para el País

sábado, 6 de noviembre de 2010

El Papa es un Jefe de Estado, cuando menos, descortés.

El Papa, en unas declaraciones realizadas sobrevolando España camino a Santiago ha vinculado el laicismo de la España actual con el anticlericalismo de la República. 

El Jefe del Estado Vaticano, líder político del único Estado europeo donde las elecciones democráticas serían "pecado", ha expresado su preocupación por el "laicismo agresivo" que existe en España en unas descaradas y poco corteses declaraciones antes de visitar un "Estado amigo". 

Si España, y en su nombre el Jefe del Gobierno democrático español, hiciese declaraciones sobre los problemillas de la política vaticana (DDHH de la infancia, democracia, igualdad de género, ...) seguro que no le gustaría y pondría el grito "en el cielo".