Empieza a existir un curioso paralelismo entre el ciclista Lance Armstrong y el político (y entusiasta del ciclismo) Mariano Rajoy: los dos se han dopado. La diferencia -por el momento- es que Armstrong ha confesado su dopaje en una entrevista en televisión con Oprah Winfrey y Rajoy todavía no ha dado el paso. ¿Que Mariano Rajoy se ha dopado igual que Lance Armstrong? Pues sí, Lance con EPO y trasfusiones de sangre; Mariano con euros y trasfusiones desde cuentas de procedencia oscura. Podemos decir más: sin los enormes recursos procedentes de delincuentes conocidos (Gürtel) o desconocidos, hubiera sido muy difícil que Rajoy hubiera ganado por goleada las rondas electorales de los últimos años; sin doparse, hubiera sido imposible que Armstrong hubiera ganado siete Tours de Francia.