El PP ha convertido el asunto Rivera en un fracaso propio cuando realmente es un éxito para el País

lunes, 11 de junio de 2018

No está mal dejar de echar, institucionalmente hablando, gasolina al fuego

Malos tiempos para ser de derechas; para la derecha del PP, que navega sin patrón y con las cañerías atascadas y pestilentes, y para la derecha de Rivera, Riverita, que ha pasado en un cuarto de hora político de torero de puerta grande a maletilla de toro de carretilla.
Y digo malos tiempos para las derechas porque gobiernan de nuevo en Españas las izquierdas; es decir, el PSOE con el apoyo por horas de Unidos Podemos; sí, porque a las 24 horas de apoyar la moción de censura que coronó a Pedro Sánchez como presidente del Gobierno ya estaba con un ataque de cuernos por el carácter centrista del Ejecutivo.
Pero lo dicho, las izquierdas gobiernan en España. Y de entrada, porque la ley lo indicaba así, han reabierto el grifo de las finanzas a la Generalitat y han destensado la situación en Cataluña.
Teniendo en cuenta que están a punto de liarse a mastilazos con las banderas de los patriotas de ambos bandos –a punto de un repique de una confrontación civil, según Borrell-, pues no está mal dejar de echar, institucionalmente hablando, gasolina al fuego. publico.es/fernando-lopez-agudin