La suspensión de celebraciones de Nochevieja se extiende por ciudades y pueblos de Europa a medida que la ómicron ha ido multiplicando los contagios.
Pero las decisiones son dispares y la anulación de los actos o su mantenimiento no depende ni de comunidades autónomas, ni de incidencias, ni de partidos gobernantes.
Hay que reconocer que esta resultando una "puta locura".
En cualquier caso, parece que cierta cordura y capacidad de toma de decisiones se mantiene y el nuevo"reajuste horario", a la hostelería por un lado, y a toda esa peña de todas las edades que siguen prostituyendo la palabra "libertad", reivindicando el "derecho a decidir" de caracter personal, y haciendo muestras claras de insolidaridad manifiesta, parece algo mucho más que simplemente razonable.
Pero las decisiones son dispares y la anulación de los actos o su mantenimiento no depende ni de comunidades autónomas, ni de incidencias, ni de partidos gobernantes.
Hay que reconocer que esta resultando una "puta locura".
En cualquier caso, parece que cierta cordura y capacidad de toma de decisiones se mantiene y el nuevo"reajuste horario", a la hostelería por un lado, y a toda esa peña de todas las edades que siguen prostituyendo la palabra "libertad", reivindicando el "derecho a decidir" de caracter personal, y haciendo muestras claras de insolidaridad manifiesta, parece algo mucho más que simplemente razonable.