Aquí, en la placa de la pared se habla del asesinato de un "héroe español".
Manda huevos. Mentiras que se mantienen de la dictadura
y que no hay "fuerza" todavía para superarlo.
Hablar así de los militares dictadores y despreciables
debería de estar prohibido en una democracia sana.
Carrero en realidad, fue un fascista y asesino con aspiraciones de suceder
al más fascistas y asesino Francisco Franco.
Voló y voló, y llegó la monarquía a propuesta del dictador.
Hoy nos hemos manifestado los que pensamos que
para que una democracia mejore sensiblemente,
su ciudadanía debería de poder elegir en votaciones la Jefatura del Estado.