El esperpento catalán no nos ha dado todavía la última noticia. Ya nos lo imaginábamos. Pero cuando creíamos que lo habíamos visto casi toda la película, nos dicen que Puigdemont huye a Bélgica (Nos había anunciado reiteradamente que quería que Cataluña se fuese de España pero, como no lo ha conseguido, él mismo se ha ido de Cataluña), y allí, en la capital europea habla con el abogado defensor de terroristas etarras. Al curso de "cómo hacer amigos" hizo pira seguro. No me extrañaría que a estas alturas gran parte de su electorado esté un poquillo descolocado.
Con las excelentes lecciones de relación con los medios y de tratamiento de la comunicación que nos han dado hasta ahora, parece que a sus excelentes consejeros de comunicación se les han acabado las pilas con la aprobación de la DUI.