ha basado las locas ensoñaciones
y su marcha contra historia
del Sr. Puigdemont,
que nadie se pregunte
dónde vamos a parar,
porque lo que urge
es parar a Puigdemont.
No le duelen prendas,
tiene el papel de mártir asumido,
pero sería un error que lo consiguiera.
Tendremos que evitarlo.
Y como nos escribe
Alcántara en Vocento
Alcántara en Vocento
habría que meterlo en vereda,
reconducirlo al camino.
Mejor eso que meterlo en la cárcel.
Parece que a Rajoy
sólo le quedan las dos opciones.
Vereda o cárcel.
Con la primera ha fracasado.